En los últimos años, el uso de piedra sinterizada para el recubrimiento de superficies se ha convertido en la principal opción para arquitectos y constructores en la terminación de sus proyectos de acabados. Esta tendencia ha relegado a un segundo plano a piedras naturales como el granito, el mármol y el más reciente Quarztone. La piedra sinterizada es un material con excelentes características y prestaciones. Gracias a la combinación de elementos naturales como el cuarzo y el feldespato, y al sometimiento a altas presiones y temperaturas, esta piedra es altamente resistente al calor, impermeable a líquidos, y resistente a rayones y golpes contundentes. Sin embargo, es importante entender la relación entre precio y calidad al elegir este tipo de piedra. Para ilustrar esta relación, podemos compararla con la compra de un dispositivo electrónico: ¿quiero calidad?, ¿deseo un excelente desempeño?, ¿espero desarrollos tecnológicos y aspectos estéticos exclusivos? Si la respuesta es sí, es probable que el nivel de inversión sea alto. Actualmente, se pueden encontrar en el mercado piedras sinterizadas de bajo, medio y alto costo. Las de bajo costo se producen rápidamente, lo que resulta en productos con menor resistencia a golpes contundentes debido a los cortos tiempos de temperatura y compresión. Las de costo medio ofrecen mejores prestaciones en cuanto a resistencia (golpes, temperaturas, rayones) y aspectos estéticos, con diseños más detallados que las de bajo costo. Por último, las piedras de alto costo pertenecen a las marcas más reconocidas de sinterizado en el mundo, como Dekton y Neolite, y se caracterizan por diseños exclusivos y resistencia premium, entre otras prestaciones. Finalmente, es importante entender que la piedra sinterizada es un fenómeno en la industria de acabados. Aunque tiene excelentes características, no necesariamente debe reemplazar a las piedras naturales como el mármol, el granito y la cuarcita, que también ofrecen un buen desempeño y versatilidad según el proyecto en el que se utilicen.